El juego posicional o ataque posicional es una definición que se oye muy a menudo ahora en cualquier tertulia o retrasmisión deportiva, entre otras cosas porque el Barcelona basa mucho su juego en atacar así, con ello se ha conseguido que la mayoría de equipos del futbol catalán por el éxito conseguido con este equipo busquen jugar parecido o al menos intentarlo. Salir desde atrás jugando, es evidente lleva más riesgo implícito, puedes perder el balón en zona cercana a portería, además los defensores en muchos casos en su formación no han sido entrenados para salir mediante el juego en corto y esta forma de jugar exige mayor calidad técnica.

Esta forma de juego depende de la calidad de los jugadores, pero la verdad hoy en día la mayoría de equipos sea la categoría que sea lo intentan.

El aspecto principal de esta forma de jugar sería que los jugadores se ordenan en función del balón y este estilo de juego está basado en jugar mediante pases cortos y sus jugadores dentro de sus movimientos no abandonan su zona de juego dentro del sistema de partida del equipo.

El equipo juega mostrando un bloque compacto con permanentes acciones de cobertura ofensiva, se busca la ocupación racional del terreno de juego. Los jugadores ofrecen apoyos tanto por delante como por detrás del balón de manera que se puede avanzar de forma más eficaz, es muy importante en un equipo en el ataque organizado el apoyo de emergencia de la línea anterior a zona de balón debe ser como norma siempre en diagonal y permite mantener la posesión y poder cambiar la orientación del juego cuando el jugador poseedor es apretado por el rival en la presión y no puede avanzar.

Se busca que los lo que más se mueva sea el balón, con ello se consigue acumular jugadores cercanos al balón que en caso de pérdida puedan actuar en la recuperación ( esta es una de la razones más importantes para que por ejemplo el Barcelona recupere tanto tras perder balón, que tiene muchos jugadores para poder presionar a poseedor y cercanos algo clave en un pressing correcto). Si tenemos en cuenta que muchos de los goles del club catalán son tras recuperación en campo contrario nos daremos cuenta de la importancia de las ventajas de esta estructura ( hay muchos aficionados que hablan y con razón del inicio del juego de club culé), pero analizando una amplia mayoría de sus goles son tras recuperación de balón, por lo que queda de manifiesto la importancia de un buen juego de posición dentro del terreno da cierta ventaja al perder posesión en determinada jugada.

Otros concepto clave es un buen escalonamiento de líneas de manera que siempre haya varias líneas de pase abiertas al poseedor, tanto en amplitud como en profundidad donde nunca se debe estar en las misma línea de pase que un compañero porque sino un jugador rival tapa a varios nuestros, algo recomendable es apoyo diagonal con línea anterior mientras la última línea, es decir, la delantera si balón esta en defensa este en línea de pase con el balón así se consiguen triángulos sucesivos durante el proceso ofensivo. Cuanto más abanico de posibilidades tenga el jugador con balón mejor, siempre manteniendo vigilancias defensivas correctas. Siempre que sea posible moviéndose a la espalda de jugadores rivales o buscando recibir desde su espalda concepto que (Sans, Frattarola 1999) llaman oscurecer, es decir, buscar recibir donde el rival no pueda ver simultáneamente al rival y el balón a la vez.

Recibir a la espalda de la línea que presiona es otra seña de identidad de esta forma de jugar, crear superioridad a espaldas de la línea de presión creando triángulos por delante del poseedor.

En mi opinión todo movimiento de balón sin superar línea es una posesión en muchos casos efervescente y que lo único que consigue que tarde o temprano haya algún error y el rival nos cree una situación de gol, es evidente que se debe mover el balón porque de esta manera movemos la defensa rival hasta conseguir espacios para progresar pero en muchos casos se toca por tocar sin avanzar y en futbol se basa en quien marca más goles y no quien más tiene la posesión.

Autor: Futbollab